Los artículos de opinión recogidos en esta sección reflejan nuestro compromiso con los principios y valores fundamentales que nos definen como partido, siempre desde una visión basada en la libertad, la responsabilidad y la buena gestión. Publicados en los medios digitales de Sant Cugat (Tot Sant Cugat y Cugat Media), abordan principalmente cuestiones de actualidad local, sin dejar de lado otros temas de interés general que, por su relevancia, merecen nuestra atención y análisis. Estos escritos están firmados por miembros del Partido Popular de Sant Cugat y de Nuevas Generaciones, quienes aportan su visión y dedicación a la ciudad
¿Y cómo mira Dios al hombre?
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Qué fácil es hablar del Papa. Qué fácil es decir si nos gusta o no. Cuántas veces se interpela al cristiano - ¿Y tú qué opinas del Papa? ¿Este sí? ¿Este no? ¿Más tradicional? ¿Más moderno?- como si la esencia de la fe dependiera de simpatías ideológicas o de afinidades estéticas.Pero ¿y cómo mira Dios al hombre?
La historia de la Iglesia está repleta de santos Papas, de Papas mediocres, de Papas pecadores. Y sin embargo, a pesar de los errores y las sombras, ha perdurado lo más importante: la mirada del Padre sobre sus hijos. Una mirada que no depende de la opinión de las redes, ni del último titular, ni del grado de coherencia humana del obispo de Roma. Es la mirada del que ama antes de que nosotros sepamos hablar.
¿Y cómo mira Dios al hombre? Pienso en ello cuando miro a mis hijos mientras duermen. Mientras la casa duerme y mayo no impide que aún cubra sus cuerpos pequeños con una sábana, como si el amor también abrigara. Miro su frente tranquila, su respiración honda, y pienso: no hay mérito en ellos, pero hay belleza. No hay consciencia en este sueño, pero hay verdad.
Y pienso: ¿cuánto más Dios nos mirará así? ¿No será que antes de pensar qué opino del Papa de Roma, tengo que recordar cómo Dios mira al hombre? Porque claro que puedo decir qué me parece el Papa. Y claro que puedo juzgar, si me empeño. Pero si al mirar a mis hijos dormidos, yo -pobre hombre, limitado, cansado- soy capaz de callar mis juicios y contemplar con ternura ¿No hará lo mismo, aún más, el que es todo amor y verdad?
¿Y cómo mira Dios al hombre? Con los ojos del que crea sin condiciones, del que espera sin cansancio, del que perdona sin cálculo. Con la mirada del Padre que ve más allá de nuestros aciertos, errores, o Papas.
Así que la próxima vez que me pregunten qué me parece tal o cual, quizá responda con otra pregunta: ¿Y cómo mira Dios al hombre? Tal vez ahí empiece de verdad la fe.
